viernes, 27 de abril de 2012

Y un día, nació el Kirchnerismo

Lenta pero inexorablemente el Movimiento Nacional que supo encarnarse en distintas expresiones políticas de la Argentina como el Yrigoyenismo y el Peronismo, finalmente hoy reencarno en el Kirchnerismo. Un largo camino llevo esta construcción que se nutrió y nutre del invalorable aporte del Peronismo como base de sustentación y marco ideológico, pero hoy finalmente hizo su aparición como construcción política superadora. Si quieren, podemos decir el Peronismo del siglo XXI, pero a no hacerse problema por los nombres que Perón y Evita seguro se ríen en el cielo y poco caso le hacen a estas nominaciones. El Kirchnerismo hace su aparición con una estructura movimientista y participativa, basada en una concepción humanista del capitalismo, que no duda en ponerse los guantes y plantarse firme e inteligentemente frente a quienes le disputan el poder desde las minorías, reflejos heredaros sin duda de los genes peronistas. Sus tácticas electorales y la utilización de las herramientas formales partidarias también son herencia genética del Peronismo. La concepción de la Patria Grande Sudamericana y su forma de construir poder y tejidos conductivos sociales tal vez es superior al concepto más esquematizado de Perón, aunque la coyuntura histórica indudablemente es mejor ahora que hace 60 años. Quiso la historia que dos estadistas gigantescos convergieran en un solo animal político, que supo construir desde el abismo una realidad promisoria y preparar el terreno para heredar su ADN a una nueva generación que complete la tarea. Jamás se estuvo tan cerca de lograrlo, la muerte de Eva hirió de muerte al Movimiento Nacional de mitad de siglo XX y este agonizo lentamente durante 25 años más. ¿Será posible finalmente terminar lo tantas veces trunco? Hoy me emocione hasta las lágrimas viendo a esa mujer fundirse con su pueblo en besos, caricias y abrazos, que lejos de reclamarle la cuida y acaricia como a una madre. Esta noche por primera vez creí que el proceso puede superar a la conducción de Cristina y continuar más allá de su mandato, ya que ella está profundamente convencida de su necesidad. Resulta casi imposible evaluar situaciones históricas mientras se desarrollan. Para quienes aprendimos la política a partir de pelearla desde abajo con los dedos en “V”, resulta deslumbrante el proceso de incorporación generacional del Kirchnerismo y hasta nos da un poco de envidia. Hoy Cristina finalmente mostro lo que tiene, nadie le podrá decir que solo es la coyuntural líder del aparato peronista. Cristina es Cristina más allá del resto y difícilmente haya organización política que le pueda disputar legitimidad. ¿Estaré enfrentando las mismas cavilaciones que los radicales de Forja? Dios quiera que sí.